Hay que ver lo que dan de sí los supermercados, pues allí encuentro un fondo inagotable de situaciones graciosas, al igual que en los centros médicos, pero afortunadamente a los segundos voy una vez al año y no para mí (véanse mi entrada sobre "Las propiedades del limón").
El otro día, en la zona de refrescos, se me acerca un señor jubilado con una botella de cola en la mano y me dice:
"Por favor, es que no veo bien la etiqueta". "¿Esta es la que no lleva "cocaína"?. Me eché a reír y le dije: "Espero que no; ni esta ni ninguna otra". "Quiso decir cafeína, ¿no?". El hombre se moría de la risa por lo que había dicho: "Eso, eso"."Es que ya no sé ni lo que digo".
En fin, que da gusto hacer la compra a veces.
"Por favor, es que no veo bien la etiqueta". "¿Esta es la que no lleva "cocaína"?. Me eché a reír y le dije: "Espero que no; ni esta ni ninguna otra". "Quiso decir cafeína, ¿no?". El hombre se moría de la risa por lo que había dicho: "Eso, eso"."Es que ya no sé ni lo que digo".
En fin, que da gusto hacer la compra a veces.
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